No sólo se trata de más casos sino también de mayor gravedad
La pandemia ha elevado más si cabe el número de casos de trastornos alimentarios entre los jóvenes aragoneses. No sólo se trata de más casos sino también de mayor gravedad como así asegura la Asociación Arbada, que trabaja con muchas familias. El verano además complica todavía más las afecciones que esta patología produce en los pacientes.
En este último año, las atenciones telefónicas han sido 293, que son 108 más que el año anterior. Se han recibido más visitas de familias y ha crecido también la atención en situaciones de crisis. Los medios de comunicación y las redes sociales explica Edurne Larrarte, presidenta de Arbada, no han ayudado demasiado «todo era hacer deporte, culto al cuerpo, adelgazamiento, si esto a los que estamos sanos nos ha hecho daño imaginad a los pacientes de TCA que están siempre pendientes del cuerpo».